LOADING

Type to search

Tecnofilia… ¡La nueva adicción de los adolescentes!

Share
Comparte

Los chats, los celulares, los videojuegos, son el pan de cada día de la mayoría de los jóvenes. Hasta hace poco, éstos eran simples pasatiempos, pero la modernidad y el avance de la tecnología,

 Proveemos a nuestros hijos los artículos necesarios para hacer su vida y la nuestra más práctica como el celular, la computadora y los videojuegos. Sin embargo, estas aparentes ventajas suelen convertirse en un arma de doble filo y llevar a nuestros hijos a sufrir una adicción por las mismas…

Los chats, los celulares, los videojuegos, son el pan de cada día de la mayoría de los jóvenes. Hasta hace poco, éstos eran simples pasatiempos, pero la modernidad y el avance de la tecnología, han contribuido a convertirlos en una verdadera adicción muy difícil de dejar. Y como toda dependencia, no permite llevar una vida tranquila, normal y saludable.

Una Nueva Adicción

Esta nueva clase de adicciones y adictos surgió a finales del siglo pasado con una característica especial, su dependencia no es como el uso de drogas, al alcohol, al tabaco o alguna otra sustancia de las llamadas ilegales, sino más bien se refiere a actividades y comportamientos cotidianos que absorben mucho del tiempo, energía y pensamiento del joven, hasta convertirse en verdaderas adicciones que impiden llevar una vida normal.

 Las nuevas tecnologías han dado origen a un tipo de adicción. Los chats de Internet, la telefonía móvil o los videojuegos (tecnofilia), están provocando numerosos casos de dependencia entre los adolescentes en situación de riesgo, mismo que encuentran en estas herramientas un refugio que les aleja de sus problemas emocionales o familiares.

 Estas, han pasado a formar parte de las denominadas adicciones psicológicas o adicciones sin drogas.  La adicción -en términos médicos- es la dependencia psicofisiológica habitual a una sustancia o práctica, que escapa del control de la voluntad.

 “Se trata de conductas repetitivas que resultan placenteras en las primeras fases, pero que después no pueden ser controladas por el individuo. Es habitual que este tipo de adicciones (sin drogas) se combinen con una o varias adicciones a sustancias químicas”, ha señalado Enrique Echeburua, catedrático de la Facultad de Psicología de la Universidad del País Vasco, durante su participación en las “VI Jornadas sobre Adolescentes, Dependencias y Nuevos Medios de Comunicación”, organizadas por la Asociación Proyecto Hombre.

 Pero las nuevas tecnologías no generan por sí mismas la adicción: sino que son las personas con determinados problemas previos, las que más recurren a ellas y hacen un uso indebido de las mismas. “Debemos reflexionar sobre su valor educativo y sobre los efectos negativos que tienen en los jóvenes que están en situaciones de riesgo. Bajo el comportamiento adictivo normalmente subyacen problemas más profundos a los que hay que dar respuesta”, indica Bartomeu Catalá, presidente de la Asociación de Proyecto Hombre.

Los jóvenes que se encuentran en situación de mayor riesgo son aquellos que han crecido en un ambiente familiar poco propicio para su desarrollo, ya sea una familia disfuncional o cuando los padres les prestan poca atención, pero que el resultado en ambos casos sea una baja autoestima en el adolescente por lo que tienden a huir de un mundo adulto que les resulta hostil refugiándose en las nuevas tecnologías. 

Adolescentes: firmes candidatos

Los adolescentes parecen ser firmes candidatos a sufrir este tipo de dependencias porque se encuentran en un periodo en el que deben adaptarse a numerosos cambios físicos y emocionales. Muchos jóvenes recurren al teléfono móvil o a los chats de Internet porque son incapaces de aceptar su imagen corporal. Con estas tecnologías pueden distorsionarla y convertirse en el “yo ideal” que la sociedad reclama.

 Este comportamiento les impide desarrollar sus habilidades sociales, les hace hipersensibles a los juicios y acrecienta sus sentimientos de inseguridad. En estos casos la familia debe prestar atención a los primeros signos de alarma que se asocian al comportamiento adictivo, como son la tendencia al aislamiento, la ruptura de las relaciones sociales, el fracaso escolar o la agresividad.

Cómo Superar la Tecnofilia

 Las claves para superar este tipo de dependencias a la tecnología pasa por solucionar los problemas de base, fomentar la comunicación familiar, restablecer la confianza con los padres y los amigos y aceptar la imagen corporal, que es uno de los factores que más contribuyen a la adicción.

Tecnofobia y Tecnofilia

El desarrollo tecnológico ha dado origen a dos nuevos términos que se refieren a la actitud que las personas tienen ante los últimos avances:

Tecnofilia: supone un interés acentuado por las tecnologías con cierta dependencia imaginaria con la máquina. Tienen una fe ciega en las tecnologías y se caracterizan por ser consumidores indiscriminados.

Tecnofobia: los tecnofóbicos están convencidos que los avances tecnológicos producen tensiones sociales y psicológicas, y que son responsables de los desastres que se viven en el campo social, económico y cultural. Por tal motivo, las evitan a toda costa.

 En la actualidad existen muchos jovencitos que se encuentran atrapados en este tipo de adicciones y que por miedo o pena no se atreven a pedir ayuda. Si cree que su hijo/a está pasando por un problema similar, no espere ‘a ver si se compone solo’… ¡Busque ayuda cuanto antes!

Comparte

Next Up

WordPress Appliance - Powered by TurnKey Linux